Los tratamientos faciales con neuromoduladores son uno de los procedimientos más demandados en medicina estética por su capacidad para suavizar las arrugas de expresión del tercio superior facial (frente, entrecejo y patas de gallo) sin modificar la naturalidad del rostro. Pero ¿qué ocurre con esas arruguitas finas que, aun con la musculatura relajada, siguen marcadas en la piel?
La Dra. Ana Chaqués, especialista en medicina estética de ilahy, nos explica en este vídeo reciente una solución eficaz y mínimamente invasiva: la técnica blanching, una estrategia avanzada para perfeccionar los resultados tras la aplicación de neuromoduladores.
“Primero hemos trabajado las arrugas de expresión del tercio superior facial con neuromoduladores, con lo cual ahora tiene la musculatura relajada. Y las arruguitas que todavía quedan marcadas las vamos a trabajar con una técnica que se llama blanching”, comenta la doctora mientras realiza el tratamiento.
¿En qué consiste la técnica blanching?
El blanching es una técnica que se utiliza para tratar arrugas muy finas y superficiales, especialmente en zonas delicadas donde no se busca volumen, sino simplemente rellenar suavemente la línea marcada. Se aplica un ácido hialurónico de baja densidad mediante microinyecciones muy superficiales, justo en el plano correcto de la piel.
“Es una zona con la que hay que tener mucho cuidado porque tiene muchas arterias, y hay que hacerlo muy superficial, sin profundizar. Hay que tener muy claro el plano donde se está inyectando”, destaca la Dra. Chaqués, subrayando la importancia de la precisión y experiencia médica en este tipo de tratamientos.
Neuromoduladores: el primer paso para relajar la expresión
En ilahy utilizamos neuromoduladores para prevenir y suavizar los gestos repetitivos que provocan arrugas dinámicas, aportando un aspecto más descansado, armónico y rejuvenecido. Es un tratamiento seguro, con resultados naturales, y que permite combinarse con otras técnicas para mejorar la textura y el acabado de la piel.
¿Para quién está indicada esta combinación?
La combinación de neuromoduladores y técnica blanching está especialmente recomendada para pacientes que desean:
- Relajar las arrugas de expresión sin perder naturalidad.
- Mejorar la textura de la piel en zonas como el entrecejo o la frente.
- Tratar líneas muy finas sin aportar volumen.
- Realizar un tratamiento progresivo y adaptado a su fisonomía.
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