La Morfopsicologia estudia los rasgos faciales en relación a la personalidad. Aunque esta disciplina carece de una base científica, es innegable que el rostro refleja gran parte de tu pasado y por tanto de tu personalidad. No se trata de afirmar una relación absoluta entre un rasgo fisiognómico y un rasgo de la personalidad, pero algunos rasgos de nuestra cara pueden ser indicadores de nuestras actitudes, experiencias y gustos, así como de la influencia del entorno sociocultural.
No es tanto cómo estos rasgos faciales muestran nuestra personalidad, sino cómo estos rasgos son percibidos por el resto de las personas.
Los ojos
Los ojos transmiten nuestras emociones. En este sentido, unos ojos grandes pueden mostrar sinceridad y ambición, mientras uno ojos pequeños pueden indicar inteligencia e inquietud. Por otro lado, cuanto mayor es el iris mayor capacidad de mostrar emociones tiene esa persona. La forma del ojo y el tipo de mirada tambien pueden influir en nuestra personalidad. Hay miradas tímidas, cansadas, huidizas, fijas, audaces, hipócritas, críticas, envidiosas, perezosas, tristes, vitales, honestas..
Mediante una blefaroplastia para remoldear los párparos es posible rejuvenecer el aspecto del rostro. Un tratamiento de bótox en cejas y entrecejo también ayuda a conseguir la mirada que deseamos proyectar.
La boca
La boca y sus labios muestran nuestra expresividad. El grosor de los labios y la forma de la boca pueden sugerir claridad en la forma de pensar y expresarse, pueden señalar confianza y seguridad, y sin duda los labios son rasgos que expresan sensualidad.
Para aumentar el volumen de los labios podemos recurrir a un tratamiento de rellenos de ácido hialurónico para conseguir unos labios más carnosos que enfaticen la expresión de nuestro rostro.
La nariz
La nariz es un rasgo facial que sin duda marca nuestra imagen, y con ella la impresión que mostramos al mundo. Ua nariz respingada es percibida como nobleza, una nariz larga como determinación, una nariz aguileña como sensual, una nariz recta como ordenada o una nariz arqueada como creatividad.
Una cirugía de nariz o rinoplastia puede corregir el aspecto de nuestra nariz para conseguir la apariencia que deseamos.
Las orejas
Las orejas, su forma y posición son vistas como un indicador de determinación y valentía en la toma de decisiones. Unas orejas altas sugieren una gran rapidez en procesar información y unas orejas bajas indican indecisión.
Gracias a la otoplastia para corregir el aspecto de las orejas, es posible retocar la forma y posición de las orejas y conseguir la apariencia deseada.
Arrugas en el rostro
Las arrugas son sin duda una muestra de nuestras experiencias vividas y por tanto las personas las perciben como signos de mal humor (arrugas en la frente), obsesión (arrugas en el entrecejo), tristeza (arrugas en la frente y ojos), reflexión (arrugas en las cejas), preocupación (patas de gallo), orgullo (arrugas cerca de la boca).
Hoy día hay muchos tratamientos de medicina estética para reducir arrugas, como el láser facial Co2RE capaz de eliminar manchas e imperfecciones en la piel, rellenos faciales de ácido hialurónico para conseguir eliminar arrugas, los tratamientos de rejuvenecimiento facial mediante radiofrecuencia para reducir arrugas y líneas de expresión, inyecciones de botox para eliminar arrugas sin pasar por quirófano, o tratamientos de revitalización facial mediante inyecciones de plasma rico en factores de crecimiento.
El rostro
El rostro y su morfología sugieren algunos rasgos de la personalidad. El rostro puede dividirse en 3 áreas diferenciadas, y cada una de ellas es un indicador de la personalidad de dicha persona.
- Cerebral: el área que abarca el cráneo, frente, cejas y ojos. Esta zona habla acerca del pensamiento y de la capacidad cerebral de la persona. Una frente alta es percibida como de persona intelectual, y una frente baja como de persona firme y obstinada. Así, una frente rectangular es entendida como de persona organizada.
- Sentimental: el área que comprende los pómulos, mejillas y nariz. Suele relacionarse con rasgos emocionales, empáticos y afectivos. La nariz es un rasgo facial muy identificativo que marca cómo nos perciben los demás. Unas mejillas prominentes se identifican con el liderazgo y unas mejillas retraída con la humildad.
- Instintiva: el área de la mandíbula, boca y el mentón. Se identifica con rasgos relacionados con el impulso, la determinación y el instinto. Así, una mandíbula ancha tiende a verse como de persona dura y luchadora, y una mandíbula promimente de persona instintiva. Un mentón que sobresale se percibe como espíritu competitivo.
La forma del rostro también influye en cómo nos perciben. Una cara redonda es vista como sinónimo de iniciativa, una cara ovalada indica imaginación y creatividad, una cara cuadrada es reflejo de optimismo, una cara rectangular muestra confianza, y na cara triangular es percibida como una persona intuitiva.
Una cirugía del mentón o un lifting facial puede conseguir el rostro proporcionado que deseamos. Mediante rellenos faciales de ácido hialurónico es posible aumentar el volumen de rostro y pómulos, o inyecciones de botox para conseguir un efecto lifting.
Los rasgos faciales son percibidos por la sociedad como rasgos de la personalidad, y aunque finalmente no tengan ninguna relación con la realidad, nuestra imagen y la impresión que damos influyen en nuestra vida y en cómo nos perciben.
Algunos tratamientos de medicina estética facial y cirugía facial pueden ayudarnos a mejorar nuestra imagen, para ganar confianza en nosotros mismos y mejorar nuestro aspecto y salud. Consulta con un asesor de imagen sobre qué tratamientos puedes necesitar.
