Una mañana cualquiera. Te levantas, vas al baño para limpiarte la cara, miras al espejo y ¡sorpresa, te han salido varios granitos! ¿Cómo es posible que tenga acné cumplidos los treinta años?
Habitualmente el acné se relaciona con la adolescencia, pero son muchas las personas adultas que sufren de acné. En la edad adulta este problema afecta a mayor número de mujeres que de hombres, ya que los cambios hormonales afectan en la aparición del acné. Una de cada diez mujeres lo sufren pasados los 30 años. Generalmente a los 40 años desaparece definitivamente.
El acné, adulto o juvenil, aparece cuando por algún motivo se taponan los poros de la piel, causando inflamación y la formación de granos. Las causas más habituales son:
- Cambios hormonales, que provocan que las glándula sebáceas de la piel generen más sebo y grasa, taponando los poros. Estos cambios en los niveles hormonales se relacionan generalemente con la adolescencia, pero también con los períodos menstruales, el embarazo, las píldoras anticonceptivas o el estrés.
- El uso de cosméticos y maquillajes muy grasos que taponan los poros y causando una incorrecta limpieza e hidratación de la piel.
- Algunos fármacos como corticosteroides, anticonceptivos, anabolizantes o estrógenos, cuyos efectos secundarios causan lesiones en la piel en forma de granos de acné.
- Una alta humedad, produciendo una excesiva sudoración que causa lesiones en la piel y sus poros.
Los estudios no muestran que el chocolate o alimentos grasos causen acné, como habitualmente se ha creído. Sin embargo, unos malos hábitos alimenticios, con dietas ricas en azúcares refinados o productos lácteos, pueden estar relacionadas con el acné en algunas personas.
El Acné adulto puede aparecer de forma tardía, en aquellas personas que no lo han sufrido y de repente aparece a los 25-30 años, o como acné persistente, más frecuente, y que comienza en la adolescencia y no desaparece en la edad adulta.
Generalmente los granitos de acné adulto aparecen en la parte inferior de la cara, el cuello, alrededor de la boca, e incluso en el escote y la espalda. El aspecto del acné adulto se manifiesta en forma de lesiones inflamatorias, pústulas o quistes que suponen dolor, cicatrices y manchas en la piel.
Causas para tener acné en la etapa adulta
- Alteraciones en la actividad hormonal, como los ciclos menstruales de las mujeres, cambios de peso, depresión, estrés o ansiedad.
- Predisposición genética a tener acné
- Uso de cosméticos y maquillajes muy grasos que taponan los poros.
- Mala rutina de hidratación y limpieza en la piel, pero recuerda que una limpieza muy agresiva puede empeorar el problema.
- Uso de fármaco como corticoides, anticonceptivos, anabolizantes o estrógenos.
- Dieta rica en grasas refinadas, especialmente de origen animal.
- Malos hábitos alimenticios, con poca ingesta de fruta, verdura y agua.
Tratamientos para el acné adulto
Consulta la opinión de un dermatólogo para que estudie tu caso y te pueda aconsejar el tratamiento más acorde. Especialmente si el acné te ha dejado secuelas en forma de manchas y cicatrices.
Muchos de los tratamientos para el acné júvenil no funcionan en el acné adulto, como los retinoides, antibióticos o peróxido de benzoilo, que destruyen las bacterias que inflaman y lesionan la piel. Por ello es importante acudir a un centro de medicina estética de garantias que te pueda aconsejar un tratamiento para el acné adulto efectivo.
- Peeling, que limpia en profundidad la piel, eliminando el exceso de grasa en la epidermis que causa el acné. El efecto exfoliante consigue muy buenos resultatos para tratar el acné y sus secuelas.
- Láser para eliminar el acné adulto. El tratamiento con láser para el acné funciona realmente bien. Mediante un haz con una intensidad y patrón personalizado para cada paciente, se realiza un “peeling” que se centra en eliminar el exceso de grasa que obstruye los poros. Cuando el láser entra en la piel, se convierte en calor que desactivan las glándulas productoras de aceite responsables del acné.
- Carboxiterapia, que usa los efectos del dióxido de carbono (CO2), es un tratamiento efectivo para elimnar el acné y las cicatrices que deja. El el CO2 mejora la circulación en la dermis dañada, oxigenando y mejorando la calidad de la piel.
